jueves, 25 de junio de 2015

VIVIR

Ahora todo se ha ido, la melancolía rodea algunos espacios vitales cuando se declara la partida total. Emprender el vuelo, desde mi perspectiva, se vuelve más complicado... pero no imposible. Las palomas revolotean por mi cabeza pero no les permito hacer nido, no hay espacio para lo que no tiene permanencia eterna. Ni por asomo, ni por coincidencia: declaro que hoy es un día bueno para ser feliz, y mañana y el día después de mañana y cualquiera en el que me proponga cambiar los atardeceres por puestas de Sol. No soy eterna ni contradictoria, soy Liz, dueña de mis actos, con plenitud de facultades físicas y mentales para ejercer lo que mis 25 años me permiten: VIVIR

martes, 23 de junio de 2015

Recuerdo

Tanto como querer lo que se dice querer, contigo quisiera de todo. No te me vayas a poner cursi ahora que no me ves, al menos en planos físicos. No por melancolía, no por nostalgia prolongada pero esto de querer y no tener, eso si que prueba la fortaleza individual de cada uno. Tremendamente insoportable que me llegue tu agradable olor hasta esta atmósfera que yo habíá descontaminado de ti. ¿Qué hacer? Suplicar a los santos patrones de las causas perdidas, para que echen por tierra toda esta basura sentimentalista, a ver si me termino convenciendo de que no se puede, que es tarde para nosotros incluso porque en esta galaxia me está negado tu beso. Alguien, por aquí adentro, me dicta estas palabras que lanzo al éter, al infinito, aunque de sobra sé que no te llegarán... porque en esta latitud, en este meridiano y paralelo esta prohibido un "nosotros". Ausencia es la palabra que más me recuerda a ti, entre todas las cosas porque llegar no es tu fuerte, porque se atrasan todos los relojes del mundo para que seas puntual sin importar que yo te justifique, aquí adentro te incomprenden,te crucifican eternamente hasta la reencarnación , por condenarme al desvelo, por confinarme a una ventana mojada por la lluvia, que ni por asomo deja ver tu recuerdo. Se atrevería quien no soy a ir a buscarte, a echar por tierra un orgullo de quinta. Sin embargo, no lo haré. Pondré una mordaza en mi boca, pondré esposas en mis manos... el cielo se irá nublando y nos quedaremos despiadadamente sin nosotros... malo que será para siempre.

viernes, 19 de junio de 2015

Sin palabras

He vuelto a soñar con barquitos de papel. No me preguntes por qué... sin rodeos: yo no podría contestar. Y porque uno es periodista no se supone que vayas por la vida dejando que las personas te dejen sin palabras. Lógicamente, tú no eres alguien más... tienes algún tipo de magia esotérica, magia verde, diferente de la negra y la blanca como es lógico, pero magia al fin y al cabo. Me deja sin defensas despertarme de las pocas horas que he dormido porque he sentido que me hablabas, cómo si pudiera hablarte así de la nada, alguien que no está... alguien que se ha ido. Locuras mías, no sé si por periodista o por soñadora, ponerme a escribirte a estas horas que me da un dolor muy adentro leerte después de tanto tiempo, con tanto tiempo y tanta tempestad leerte ahora parece algo falto de juicio, de un poco entendimiento razonable. Pudiera decirte que simula masoquismo, pero nunca me ha gustado esa palabra, ni los calendarios, y muchísimo requetemonos la palabra fragilidad, bueno no ella en sí misma... sino su significado. He vuelto a soñar con barquitos de papel hasta que entraste en mi sueño, con ningún derecho, a traerme de vuelta.

miércoles, 17 de junio de 2015

Me quedo en silencio

Me lo llevo todo. Resolveré irme en silencio, para no perturbar tus sueños. Me creeré en serio que puedo hacerlo, es decir, que puedo dejarte mi huella, que extrañarás mis besos y morirás por mí (de la forma en que se puede morir de ausencia)… empezarás a extrañar todo lo que soy, todo lo que fuimos, y en definitiva… te convencerás de una vez de lo que dejaste ir. No es elevada autoestima, es convicción profunda en lo fuerte que puede llegar a ser un lazo, un vínculo de tipo carnal pero tirando más a lo espiritual. Será la única forma en que pueda contaminar tu atmósfera, quebrar tu férrea voluntad, aflojar tu mirada tan hierática. De mi parte solo a veces… cuando en las mañanas no quieres despertar extrañaré tu ronroneo matutino. En la distancia, quizás terminemos por convencer (nos) a ojos del mundo de que este es un amor de una vez en la vida aunque discrepemos sobre atardeceres cursis y sobre el tema musical apropiado, mejor el silencio, a la hora en punto de tu amor.

sábado, 13 de junio de 2015

No llegas

¿Cuándo llegaste así, descontroladamente, a ese punto sin retorno del que no quieres salir? Comprendo tus perspectivas incluso porque soy culpable, me enardezco en la idea remota de que todo es por mi causa, que al menos por eso soy absolutamente condenable. Aprendo a callar escondida en una melodía so pena de que me sorprenda el Sol esperando el regreso de quien no parte, de quien deja a propósito su huella, eternamente ella, como se puede adolecer de ausencias, adolezco por tus huellas. Me trago las ganas de gritarte, de hacer de este mar un mar inmenso solo de los dos, de un color rojo bien definido, que no te dé chance a pensar en matices ni en cambios de coloración. No será morado y por supuesto jamás será azul. De hecho, todo ha dejado de ser... todo ha cambiado ahora... todo se ha venido a menos, como si a alguien le importara aquello, me he quedado a esperarte ¿y adivina qué? No llegas.